La remolacha no es solamente un componente de nuestra dieta diaria, sino también es una inspiración en el mundo culinario. La remolacha es una fuente inagotable de hierro y ácido fólico. Contiene además un nivel alto de nitratos y otros antioxidantes. Por eso, ayuda a bajar la presión arterial y el riesgo de cáncer. Las investigaciones publicadas el año pasado demuestran que el alto nivel de nitratos en el jugo de remolacha aumenta en gran medida el rendimiento físico de los deportistas. Además, aumenta el flujo sanguíneo a ciertas partes de nuestro cerebro. Sus propiedades benéficas no es algo nuevo. La remolacha es utilizada como tratamiento de muchas dolencias, por ejemplo, la fiebre, el estrenimiento y diversos problemas de la piel. La remolacha quita el ácido úrico del organismo, purifica la sangre y tiene función bactericida.