en la cantidad de 1.06 mil millones de euros por el abuso de posición dominante en el mercado de procesadores x86. El Tribunal confirmó la decisión de la Comisión. Según la Comisión, el fabricante de microprocesadores norteamericano abusó de su posición dominante en el mercado mundial de procesadores x86 desde octubre 2002 hasta 2007, empleando una estrategia para excluir del mercado su único competidor importante, la empresa Advanced Micro Devices (AMD).